APOCALÍPTICA: ESPERANZA PARA LOS OPRIMIDOS


Lic. Bruno Valle G. 
Valoración del artículo de Severino Croatto: Apocalíptica y esperanza de los oprimidos, (Contexto socio-político y cultural del género apocalíptico) Ribla N° 7/2000  

INTRODUCCIÓN

Aunque el ensayo de Severino Croato lleva por título "Apocalíptica: Esperanza para los Oprimidos", su contenido se centra más bien en una caracterización de la literatura apocalíptica en general, abarcando tanto los textos canónicos como aquellos que quedaron fuera del canon, especialmente el Libro de Enoc y 4 de Esdras.


Los pasajes apocalípticos son más prominentes en el Nuevo Testamento, en libros como Apocalipsis, Mateo 24, Marcos 13, Lucas 21 y algunos pasajes paulinos como 1 Tesalonicenses 5:13-18, 1 Corintios 15:35-53, y posiblemente Romanos 8:18-25. El Libro de Enoc es mencionado particularmente en el análisis de Croato, dado que representa una tradición apocalíptica significativa, compuesta por 108 capítulos y cinco libros de diversas épocas. Según el autor, esta tradición apocalíptica buscaba emergir a la ley de Moisés, estableciendo un paralelo entre ambas referencias. También se menciona 4 de Esdras y el Apocalipsis Siríaco de Baruc.


Esta literatura se sitúa en un contexto temporal, sociopolítico y cultural, abarcando al menos los dos últimos siglos antes de Cristo y el primero después de Cristo. Algunos autores sostienen que la apocalíptica puede tener su origen en la literatura profética, un punto de vista ampliamente aceptado en la actualidad. El contexto sociocultural, especialmente el persa y griego, fomentaba el alejamiento de los fieles de la fe de Israel, lo que provocó luchas por parte de algunos, como los guerrilleros macabeos, quienes se resistieron a la transculturación impuesta por los griegos.


APICALÍPTICA Y LEY

Según Croato, los visionarios ofrecían una palabra alternativa de Dios a la que era administrada por los grupos religiosos dominantes. Los grupos marginados necesitaban su propia voz para liberarse de la opresión de estos grupos. Así, la ley pasa a un segundo plano, mientras que la apocalíptica se convierte en la alternativa liberadora que buscaban, aunque esta afirmación parece ser bastante especulativa.


Una pregunta predominante en la literatura apocalíptica es: ¿Hasta cuándo? (Daniel 8:13; Apocalipsis 6:10). Este clamor representa la súplica de los oprimidos pidiendo justicia al Dios de los cielos. La apocalíptica es una literatura que motiva a retener la identidad frente a corrientes culturales invasivas que buscan apartar al fiel de su fe y personalidad creyente. Como consecuencia de no someterse a estas exigencias culturales, el oprimido puede enfrentar tres posibles consecuencias: el martirio, la persecución o la marginación social.


1. Cosmovisión Apocalíptica


En general, los escritores apocalípticos describen la solución del sufrimiento en un mundo eterno que está por venir. Se habla de dos mundos: el presente, lleno de sufrimientos, y el venidero, de consuelo. Esta es la forma en que Dios ofrece solución al sufrimiento de los fieles, preparando un mundo donde lo malo no existe. Parte de esa visión incluye la resurrección, el juicio de buenos y malos, y el Reino de Dios.


2. Género Literario “Apocalipsis”


El género apocalíptico se distingue por varias características:

  • Transmisión de la revelación: a través de visiones, audiciones o viajes, con un mediador que entrega el mensaje, como ángeles o, en el Nuevo Testamento, Jesucristo. El receptor suele ser un seudónimo, como Enoc, Moisés o Juan.
  • Contenido: generalmente incluye seis aspectos: sucesos primordiales, historia del mundo o de Israel, salvación presente, una crisis escatológica, juicio o destrucción de los malos, y la salvación escatológica.
  • Escenario espacial.
  • Conclusión narrativa.

Es importante señalar que estas características no son uniformes en todos los apocalipsis, pero se pueden encontrar en muchos de estos escritos.


3. Motivos Literarios


Los motivos literarios incluyen números, animales, colores, ciudades de referencia, nubes, el cielo, las estrellas, lo trascendente, luz y tinieblas, señales, ángeles, y la destrucción del mundo.


CONCLUSIÓN

La literatura apocalíptica, en su esencia, es un faro de esperanza para los oprimidos, un llamado a la resistencia y a la perseverancia en tiempos de tribulación. En un mundo donde la injusticia y la opresión parecen prevalecer, estos textos nos recuerdan que la lucha por la justicia y la fidelidad a la fe no son en vano. La promesa de un futuro donde lo malo será erradicado y donde se restaurará la dignidad de los oprimidos se convierte en un poderoso aliciente para mantener viva la esperanza. Así, la apocalíptica no solo es una reflexión sobre el sufrimiento humano, sino un testimonio de la fe inquebrantable de aquellos que, a pesar de las adversidades, siguen clamando por la justicia divina y el establecimiento de un reino de paz y equidad.

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